Son espacios comerciales que se han ido recuperando. En este post os hablamos de bonitas barberías modernas que siguen siendo lugar de cuidado y relajación para el consumidor masculino.
Las peluquerías de hombre se fueron extendiendo al tiempo que el afeitado se convirtió en un hábito privado. Esto ha ido cambiando en los últimos años, y son más los espacios que cuidan tanto el vello capilar como el facial de los varones.
La estridencia define a Black Beard Barbershop, diseñada por B&V Studio y ubicada en Moscú. Ladrillo, techo de metal oxidado, suelo de azulejos, tocadores llamativos, un sofá oscuro para la zona de relajación, graffiti en las paredes, etc. Es un eclecticismo heterodoxo que conserva los colores blanco, rojo y azul de los típicos postes de barbería en su mostrador de entrada.
Con un estilo totalmente opuesto, encontramos la barbería Malayerba, situada en plena Plaza Dos de Mayo de Madrid. Un estilo vintage clásico con: mobiliario de madera, azulejos blancos, lavacabezas de latón y porcelana, y sillones de rejilla. No solo el diseño recuerda a una típica barbería del primer tercio de siglo XX, el uniforme de los empleados y los pequeños cuadros antiguos que decoran sus paredes transportan a otra época.
En pleno corazón del West End londinense, el nuevo espacio de afeitado y peluquería masculinos del grupo Murdock London fue inaugurado hace pocos días. Adapta el concepto de barbería inglesa al caballero british moderno y lo hace con una amplia oferta de productos para el aseo como: los del después del afeitado, para la barba, el cuidado de la piel o colonias. Artículos todos con el sello británico. El diseñador Erik Munro concibió dos espacios: la entrada del local, ideada para la venta, y la más interior en la que los clientes pueden rebajarse la barba, cortarse el pelo o relajarse tomando un whisky. Una suerte de club exclusivo de principios de siglo XX adaptado a 2015.
El interiorismo de las barberías es muy dispar, también en cuanto a disposición del espacio. Locales que son más escuetos y consiguen sensación de mayor amplitud aprovechando, por ejemplo, un patio interior. De otra forma, existen barberías abiertas gracias a la sucesión de áreas, desde el exterior al interior del local. Esto ocurre en el negocio híbrido del estilista Isaac Salido, del que ya hablamos en este blog, que combina el cuidado personal masculino con una cafetería.
Queremos terminar este post con otras dos muestras de bonitas barberías. Por un lado, una que mezcla mobiliario blanco y aséptico con matices de madera retro. Por otro, la apuesta arriesgada de un espacio que aúna grandes cristaleras con elementos metálicos que dan un aspecto rompedor.
Como hemos visto, las barberías resultan como cualquier otro comercio: son el reflejo de la personalidad y el estilo de de sus propietarios.
Fuente imagen: retaildesignblog.net