Aunque realmente lleva siendo verano desde hace un par de olas de calor, la estación, como tal, acaba de llegar: las piscinas están abiertas, los abrigos y bufandas guardados bajo llave y los niños de vacaciones en los colegios. ¡Es el momento perfecto de plantear ideas de escaparates veraniegos que aplicar en nuestro negocio!
En su momento hablamos del marketing sensorial y cómo podemos realizar acciones de promoción que apelen directamente a los sentidos de nuestro cliente. También hemos leído que el buen tiempo, y el calor, influyen directamente sobre nuestras decisiones de compra. Así que cuando nos tengamos que poner manos a la obra con nuestro visual merchandising debemos tener en cuenta estos dos factores y lograr crear un vínculo con el cliente a través de nuestros displays.
Es importante conocer bien el tipo de consumidor al que queremos dirigirnos, el tipo de productos que queremos promocionar y la ubicación de nuestro comercio. También es un buen momento para anunciar la realización de promociones y rebajas, destacando los artículos más atractivos y más, por decirlo de algún modo, seductores.
Un buen escaparate veraniego tiene que transmitir sensaciones positivas, tiene que ser fresco, original y acorde con el ritmo de la estación. No existe una regla de oro para construir la decoración perfecta durante esta estación, pero sí es cierto que hay una serie de elementos que se suelen repetir entre retailers en estas fechas: los motivos náuticos, la playa o aquellos motivos estivales de temporada –desde frutas a accesorios-.
Tampoco hace falta ni gastarse un dineral ni encargar esculturas XXL ni nada por el estilo, con un poquito de esfuerzo, dedicación e ingenio podemos conseguir cosas bastante pintonas y que seguro que gustarán a vuestros fieles. Uno de los ejemplos que más nos gustan son los dioramas por encargo que realiza Tea on the Moon y que podéis ver en su web. Imaginad un escaparate estival con vuestros productos y varias escenas representadas en esta técnica. Son geniales y podemos hacerlos con una gran variedad de materiales.
También es posible conseguir cosas originales y diferentes con elementos típicos, por ejemplo, con colchonetas y flotadores. En Oh Happy Day se dieron cuenta de que parecían polos de helado… pero sin palo. Así que se pusieron manos a la obra y crearon unos con un poco de cartón y maña. Un poco de cinta adhesiva, cuerda para colgarlos y listo. Es uno de los escaparates veraniegos más originales que hemos visto y podéis aprovecharlo incluso para sortear los flotadores de regalo como una promoción para fidelizar clientes. Y, además, este verano, las colchonetas de formas para la playa y piscina están de moda.
Una iniciativa que también nos ha gustado es la que pusieron en marcha desde las asociaciones del comercio y de empresarios de Cuenca junto con la escuela de arte Cruz Novillo de la ciudad, para que los alumnos diseñasen los escaparates veraniegos de diez comercios locales. Además de crear un sano vínculo comercial y dinamizar el barrio, este tipo de acciones permiten a las tiendas contar con expertos en visual merchandising, que les aportan ideas nuevas y contribuyen a crear experiencias únicas para el cliente.
Y si nos fijamos en lo que hacen grandes marcas, la tendencia continúa siendo la de incorporar elementos que evoquen verano. Por ejemplo el escaparate de Mulberry, que incorpora gigantes conos de helado, o el de Lanvin, muy propio para las olas de calor africano, en el que los elementos se derriten, solidarizándose con los clientes que pasan por delante.
En definitiva, el buen tiempo es un momento propicio para dejar volar la imaginación y crear composiciones refrescantes que atraigan al consumidor a nuestra tienda. Si además de ofrecer escaparates veraniegos de calidad, que muestren bien el producto y nuestra filosofía, combinamos estas técnicas de marketing con otras tan sencillas como habilitar redes WiFi para clientes o incluso que estos puedan resguardarse del calor gracias a nuestro aire acondicionado, tendremos una gran parte del trabajo hecha y nos podremos ir de vacaciones todavía mucho más contentos.