La técnica del Pop-up es como si se tratara de la ingeniería del papel. Parecido al origami, ya que los dos emplean papel doblado, el Pop-up se centra en objetos más visuales y mecánicos. Se puede ver mucho en tarjetas de felicitación o en los libros infantiles, pero ya desde hace un tiempo se está ampliando y desarrollando en muchas y variadas ramas.
La agencia parisina Well Well Designers ha creado unas lámparas muy especiales usando papel y Pop-up.
La lámpara está construida a partir de una hoja de papel, revestida con polífona, conocido más concretamente por poliestireno extraído, un aislante térmico. El papel es cortado y se hacen incisiones de tal manera que, al doblarlo en un ángulo de 90º, se produzca un triángulo o un módulo circular.
Estas lámparas están diseñadas para la esquina de una habitación, ya que la lámpara crea una forma luminosa, interactuando con la arquitectura.
De esta manera se aprovecha un espacio a menudo olvidado por el diseño, estableciendo en el espacio un ambiente acogedor y moderno.
Están hechas a mano y hay diseños para todos los gustos.
Realmente es un claro ejemplo de buena ingeniería del papel donde la sencillez y la armonía resaltan el trabajo que hay detrás de esta gran idea.